Los viveros de empresas y las nuevas empresas deben darse cuenta de que, a menudo, una combinación de dos o más mentores, que abarquen la estrategia, la industria y la tecnología, es lo que funciona.
Por: Ajay Batra
Durante las celebraciones de nuestro 74º Día de la Independencia, el Primer Ministro exhortó a la nación a convertirse en "Aatma Nirbhar" para que produzcamos en la India, para nosotros y para el mundo. Su mensaje lleva implícita la necesidad de fomentar la innovación y las empresas locales para lograr el tan necesario impacto en la sanidad, la educación y la empleabilidad. Se espera que el renovado interés del Gobierno por la innovación y el espíritu empresarial alimente las ambiciones de nuestros jóvenes y desarrolle nuevas generaciones de creadores de empleo.
El ecosistema indio de empresas emergentes en general, y nuestros viveros de empresas en particular, tendrán un importante papel que desempeñar para hacer realidad este sueño. Ya hay un número creciente de incubadoras y aceleradoras académicas y privadas, muchas apoyadas por la Misión de Innovación Atal de NITI Aayog y el Departamento de Ciencia y Tecnología, que están actuando como catalizadores de este movimiento. Estas incubadoras ofrecen a las empresas de nueva creación la tan necesaria tutoría empresarial, asesoramiento sobre dominios, contactos con clientes y presentaciones a inversores.
Para contribuir al desarrollo nacional, nuestros viveros de empresas deben centrarse en las siguientes áreas:
Los viveros de empresas deben ser inclusivos y tener impacto
Aunque tenemos ejemplos como Deshpande Startups (Karnataka) y ALEAP (Hyderabad) que se centran en empresas rurales y centradas en la mujer, respectivamente, para un país del tamaño y la variedad de la India necesitaremos incubadoras en todos los distritos que aprovechen los conocimientos y las redes locales y proporcionen acceso global a los empresarios locales. En última instancia, el éxito de una incubadora depende del éxito de las empresas emergentes a las que apoya. Así que, además de las medidas de entrada/proceso, como el número de programas/cohortes/mentores/inversores/graduados, los viveros de empresas deben desarrollar cuadros de mando de gestión que les ayuden también a hacer un seguimiento de los resultados, por ejemplo, las empresas emergentes que siguen existiendo después de un año, los fondos recaudados, el número de puestos de trabajo creados, etc.
Mejorar el compromiso con mentores de calidad
La mayoría de los empresarios de éxito citarán el apoyo oportuno y pertinente (y la confianza) que recibieron de sus mentores como un ingrediente vital de su éxito. Aunque los viveros de empresas suelen tener un gran número de mentores en sus sitios web, muy pocos de ellos están activos y aún menos son eficaces. La tutoría de empresas incipientes es una actividad intensa que requiere un profundo compromiso por ambas partes. Los viveros de empresas deben ampliar su red (por ejemplo, incluyendo a los antiguos alumnos y profesores de la institución anfitriona, a los antiguos alumnos de los viveros y a las PYME locales) para atraer a los mentores y crear mecanismos para seleccionarlos y formarlos. Además, las incubadoras y las empresas emergentes deben darse cuenta de que, a menudo, una combinación de dos o más mentores -que abarquen la estrategia, la industria y la tecnología- es lo que funciona.
Autosuficiencia
La mayoría de las incubadoras vinculadas a universidades dependen de las subvenciones del gobierno o de la industria, y de los fondos de la institución anfitriona para cubrir sus gastos de funcionamiento. Se trata de un apoyo "inicial" aceptable para los primeros años de vida de una incubadora, pero deben convertirse proactivamente en "aatma nirbhar" por sí mismas a través de fuentes de ingresos independientes relevantes como la formación corporativa, proyectos conjuntos con la industria local, asociaciones de innovación corporativa, patrocinios, eventos, etc. Fundamentalmente, las incubadoras deben pensar en sí mismas como "startups" y desarrollar una disciplina de generación de ingresos, gestión de costes y oferta de valor a escala.
Asistencia escalable mediante tecnología
Muchas incubadoras tienen grandes ambiciones, pero están limitadas por sus recursos y, a veces, por su mentalidad. Por lo tanto, sólo son capaces de apoyar a un número limitado de nuevas empresas cada año (en cohortes o de forma independiente). La realidad es que, con décadas de aprendizaje de empresas de éxito y de fracaso, existe un vasto corpus de conocimientos que las incubadoras pueden aprovechar para prestar apoyo a un número mucho mayor de empresas de nueva creación. Las incubadoras tienen que aprovechar la tecnología para proporcionar una evaluación continua, herramientas sensibles al contexto y tutoría oportuna para ayudar a cientos, y no sólo a decenas, de startups.
La actual crisis sanitaria y las condiciones geopolíticas son un toque de atención para que los viveros de empresas colaboren más entre sí y se apoyen mutuamente para convertirse en motores viables de creación de empleo, bienestar familiar y prosperidad económica.
Fuente: MoneyControl
