En una economía de crecimiento sin empleo, el desempleo se mantiene obstinadamente alto aunque la economía crezca, ya que el número relativamente grande de personas puede haber perdido su empleo o los nuevos miembros que se incorporan a la población activa son muy superiores a los puestos de trabajo disponibles. En la India, esto último parece ser el caso, lo que impide que los beneficios del crecimiento lleguen a las masas.
Al analizar la paradoja del crecimiento sin empleo de la India, clasifiqué las razones y las posibles soluciones en un plan de acción de diez puntos:
- Formalizar los acuerdos laborales: Disminución de puestos de trabajo debido a una reducción de los trabajadores contratados (casi 70.000 fueron despedidos en el primer semestre del ejercicio 2016, frente a 161.000 altas en el primer semestre del ejercicio 2015). La contractualización es un fenómeno universal y la solución es simplemente acabar con la informalidad del empleo. Mejores salarios, seguridad laboral, entornos de trabajo seguros y prestaciones de la seguridad social solo ayudarán a los trabajadores a sacar lo mejor de sí mismos. De hecho, las empresas que fabrican productos de alta especificación son conscientes de que la mano de obra contratada puede provocar rechazos de lotes
- Aumentar el sentimiento empresarial con fuertes medidas de reforma: El empleo en las unidades de exportación, afectadas por la contracción de la demanda mundial, ha experimentado un fuerte descenso. En el sector del automóvil sólo se han creado unos pocos puestos de trabajo. Los grandes fabricantes están recortando operaciones; Nokia ha cerrado su fábrica de teléfonos en Chennai, dejando sin empleo a 8.000 trabajadores, y para Microsoft, el nuevo propietario de Nokia, fabricar teléfonos inteligentes en China y Vietnam era más barato. Siguiendo los pasos de Goldman Sachs y Nomura, JP Morgan Asset Management también ha abandonado su negocio de fondos de inversión en India. Otro caso es el de la cementera Lafarge. Hay que centrarse en reactivar el ciclo inversor, incentivar la creación de empleo impulsando las infraestructuras, encontrar la manera de bajar los tipos de interés y mejorar la "facilidad para hacer negocios".
- Mejorar la absorción de mano de obra en la economía india: La economía está generando menos puestos de trabajo por unidad de PIB: ahora se hace más trabajo con menos empleados debido a las importantes mejoras en automatización, robótica y productividad. Por lo tanto, centrarse más en los sectores intensivos en mano de obra generará empleo. Aunque sectores como los servicios financieros, el comercio electrónico y la tecnología financiera parecen obvios como sectores en los que centrarse, no debe subestimarse la importancia de las empresas de la nueva economía. Podría tratarse de la educación, la sanidad, el comercio electrónico y la hostelería. Los sectores ecológicos, como la energía solar y la eólica, serán los que habrá que vigilar a largo plazo.
- Impulso político para acelerar las cinco transiciones del mercado laboral: La transición de la explotación agrícola a la no agrícola, del campo a la ciudad, del autoempleo de subsistencia al empleo asalariado decente, de la economía informal a la formal y de la escuela al trabajo mejorará las normas de productividad.
- Planes para fomentar el crecimiento de las microempresas y las PYME: El sector de las microempresas y las PYME necesita urgentemente frenar la escasa demanda mundial y la debilidad de las exportaciones, así como diversificar la cesta de exportaciones. Aumentar el potencial de empleo de las mipymes es fundamental, ya que el sector contribuye a casi 40% de la producción manufacturera de la India, empleando a alrededor de 14-crore.
- Formación de una mano de obra preparada para la industria y el empleo: Dado el dividendo demográfico de la India, adquiere un significado especial. Con 54% de nuestra población por debajo de los 25 años, contamos con una enorme mano de obra. Desgraciadamente, muchos de ellos no pueden encontrar empleo porque sus cualificaciones no se ajustan a las nuevas necesidades de la industria. Aunque los planes de estudios han permanecido estáticos en gran medida, su aplicación se ha vuelto cada vez más dinámica. Las principales carencias de cualificación se dan en sectores como la automoción, la construcción, el textil y el comercio minorista. Aparte de esto, hay escasez de cualificaciones para puestos que van desde soldadores a albañiles y desde electricistas a enfermeros. Hoy en día, las industrias requieren competencias orientadas al mercado para satisfacer sus necesidades empresariales de mayor productividad, menores costes y mayor eficiencia. Por tanto, es imperativo que, además de reforzar sus instalaciones de formación interna, las industrias se asocien con institutos educativos y de formación, y reformen el plan de estudios, los contenidos y las metodologías de enseñanza y formación.
- El sector manufacturero necesita un impulso: Mientras que el sector servicios aporta 58% al PIB indio, la contribución del sector manufacturero es de 24%. La tardía política india de resurgimiento del sector manufacturero es la principal razón por la que el país va a la zaga de China. No se ha prestado atención al papel único que desempeña este sector a la hora de desencadenar el cambio estructural, mientras se centraba la atención en un sector de servicios menos generador de empleo, menos comercializable y menos orientado a la tecnología. No es probable que India emule una situación como la de China, donde el 34% de su mano de obra trabaja en el sector manufacturero. Sin embargo, incluso si podemos aumentar esta cifra a 20%, frente a las 11% actuales, ¡esto supondría otros 100 millones de puestos de trabajo!
- Elaborar datos periódicos y fiables sobre el empleo: La estimación periódica del número de puestos de trabajo y de diversos indicadores relacionados con ellos ha guiado durante mucho tiempo la creación de políticas en algunas de las otras economías de éxito. La generación de empleo debe ser el alma de la creación de políticas indias y, para ello, es imprescindible conocer periódicamente las estadísticas al respecto. La última vez que India llevó a cabo una estimación centrada y exhaustiva de la situación del empleo en todo el país fue en 2012 a través de la 68ª ronda de la NSSO. Ni que decir tiene que estas cifras ya no se utilizan para calibrar las exigencias políticas del país.
- Fomento y seguimiento del sector empresarial: Muchos de los puestos de trabajo en la economía son creados por los Flipkarts, Myntras y Snapdeals del mundo, y estos puestos de trabajo no son recogidos por los números. Las startups pueden ser un motor de creación de empleo. Según NASSCOM, cada día nacen en la India entre 3 y 4 startups de TI. En 2015, se crearon 1.200 nuevas empresas solo en el sector tecnológico, un 40% más que en 2014. India es el tercer país del mundo con mayor número de empresas emergentes (4.200), por detrás de Estados Unidos y Gran Bretaña, pero por delante de China e Israel. Centrarse en este sector podría generar nuevas oportunidades de empleo.
- La dignidad del trabajo: Sigue siendo un concepto exótico en la India. Barajar papeles se considera más digno que sujetar una llave dinamométrica y arremangarse en el taller. Cuanto antes cambie esta mentalidad, mejor para la India.
El informe del PNUD "Asia-Pacific Human Development Report 2016" ha advertido de que es probable que la India se enfrente a una escasez crítica de puestos de trabajo en los próximos 35 años. Hay dos maneras de ver esto: como una ola masiva de desempleo que dejará a la India a la deriva o como un recurso sin precedentes para la creación de riqueza que superará a gran parte del mundo si se le dota de las competencias adecuadas.